Las influencias globales moldean los hilos de la identidad, un concepto que hace referencia a patrones como el zellige marroquí, el arte puntillista aborigen, la confección con cuentas de los nativos americanos, etc. Estos patrones sirven como inspiración para herramientas CAD utilizadas en máquinas de coser digitales. Las máquinas Tajima, que son máquinas de bordado operadas digitalmente con capacidades de sombreado, facilitan el mantenimiento de detalles finos. Además de capturar detalles como el bordado en seda china, que aún se realiza en talleres regionales, también se preservan las técnicas tradicionales. Las cambiantes demandas del mercado, que a veces requieren diseños como logotipos en la moda escandinava, estilos minimalistas o explosiones de color en textiles surasiáticos, se integran sin problemas en los sistemas de marca de software.